miércoles, 8 de febrero de 2012

Para que no nos recorten la humanidad

Ayer tuve que ir a urgencias de un Hospital de Valencia. Acudimos con mi madre por un problema serio de una arteria obstruida( no era muy grave tras las pruebas). llegamos y yo le dije a la Dra. joven:
-Soy enfermera, y le he notado a mi madre un bulto en la carótida izquierda....
-¡¿Y si sabes tanto por qué la traes aquí?! ¡¡haberla curado tú!! Me contesto ella con muy malos modos.
-Lo ha recomendado su médico de cabecera- contesté prudentemente.
¡Otro que tal, si sabe más que nosotros que la hubiera curado él!
La doctora llamó a otro doctor para que opinara. Aún así para confirmarlo, nos remitieron a Otorrino( consultas externas), allí fueron todo lo amables que pudieron y nos mandaron a rayos para hacerle una ecografía del citado bulto. Nuestro médico de cabecera había puesto: (Posible aneurisma de carótida).
Resultados de la ECO: Estenosis( estrechez) de la Yugular.
- Yugular no se llama aneurisma; se llama estenosis, explicó el otorrino.
¿Pero por qué nos cuentas este rollo Carmela? Decís vosotros/as.
Porque fue en esa larga espera desde las 9 de la mañana hasta las 13.30 horas con una abuela de 89 años en un carro de aquí para allá cuando se me vino esta frase a la cabeza como enviada por un ser del más allá.
“Recomendar este libro para que no nos recorten la humanidad”

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